Foto obtenida de Inmoexperto.
Contratar una agencia inmobiliaria ahorra al consumidor tiempo y esfuerzo; los servicios de las agencias pueden ser costosos y a menudo se suele exigir exclusividad. Veamos el ejemplo siguiente en el cual un vendedor se encuentra en la disyuntiva de seguir los consejos de su tío o los de una agencia inmobiliaria.
El Sr. Carranza, residente en los Estados Unidos, necesita vender un inmueble de su propiedad ubicado en Lima. Para ello, su tío le recomienda que lo mejor será publicitar el inmueble en periódicos locales de tal manera que cuando se presente un potencial comprador viaje a Lima a celebrar el contrato; mientras que el Sr. Rodríguez gerente de una agencia inmobiliaria le propone publicitar la venta de su inmueble por medio de uno de sus agentes estableciendo.