Foto obtenida de www.comodecorarcasa.com
El horrendo piso rojo; los azulejos color verde limón, la moquette rosada, y la falta de dinero para cambiar esas cosas. ¿Cómo solucionar estos problemas?
Lo primero que hay que tener claro es que no se puede tratar de ignorar que hay algo allí que nos está molestando. Cuando tratan de evitar lidiar con el área de la problemática, lo que se logra es que sea obvio que no les gusta y que no saben como arreglarlo. Por lo tanto, aunque no quieran, van a tener que trabajar en ello.
Deben hacer que las partes más feas de su casa parezcan que fueron hechas por ustedes a propósito, como si ustedes mismos lo hubieran elegido. El primer secreto: cuando comienzan a trabajar con el problema, tiende a transformarse en algo no tan horrible.
Cuando estén trabajando con algo que odian, y generalmente el problema es por el color, deben enfocarse en encontrar algo que combine con ese color.
Por ejemplo, si el problema son azulejos rojos fuego, pueden utilizar algunos accesorios negros y rojo más oscuro, o muebles de marfil o de madera oscura, y de esta forma crear una habitación moderna y elegante.
Si el problema es en cambio , un baño con azulejos verde loro, también hay una solución para esto. Pueden elegir una cortina que combine con una linda alfombra y algunos accesorios delicados para crear un ambiente cálido y natural.
Por último nos encargaremos de la moquette. Generalmente las alfombras son costosas, y es por esto que es una de las partes más difíciles de remplazar.
Si la alfombra es rosada o de un verde que no les gusta, entonces pueden trabajar con el color para crear una habitación que combine con el mismo. Tanto con los rosados como con los verdes, pueden agregar amarillos o azules para disimular un poco el color de la alfombra.
Luego de esto podemos concluir que cuando estén tratando de arreglar algo que no les guste de su casa, la solución es tratar de buscar los colores que puedan combinar. Generalmente, si utilizan telas escosesas o rayadas, sirve para desviar la atención del lugar que no les gusta.
Para cada color en la habitación, deben utilizarlo al menos tres veces para que quede bien. Aunque no sean del mismo tono, si son similares, van a lograr un poco de uniformidad en el ambiente.